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¿Cómo justificar un despido en una entrevista de trabajo?
Para poder explicar un despido en una entrevista de trabajo, debemos de conocer todos los detalles de éste, ya que según el tipo de despido que hayamos sufrido será más fácil o difícil de justificar.
En primer lugar es importante saber que más vale una verdad bien argumentada, que mentir en la entrevista. Si mentimos tendremos que lidiar con preguntas difíciles en la entrevista de trabajo, y podemos ser descubiertos, así que olvidémonos de conseguir el trabajo. Además, es habitual que las empresas se informen de sus candidatos al puesto de trabajo, por lo que tal vez estén preguntando algo de lo que ya tengan información. Por eso es posible que ellos ya sepan la respuesta, y les importe más saber tu versión y si actúas con sinceridad.
Si nuestro despido ha sido procedente, pero han habido unos motivos ajenos a tu labor cómo trabajador, -como pueden ser problemas financieros en la empresa-, debemos conocerlos bien para poder explicarlos al entrevistador. Incluso si esta situación a provocado más despidos, pudiendo ser un despido colectivo. Ésto nos puede quitar responsabilidad y que nuestro perfil no pierda valor en el proceso de selección.
En el caso del despido improcedente, no debemos manifestar rencor y crítica a la empresa anterior, sino explicar los hechos sin insultos ni malas palabras para jefes o ex compañeros anteriores. Si demostramos una actitud agresiva o maleducada, -por mucha razón que tengamos-, será algo muy negativo que nos puede hacer perder muchas posibilidades para conseguir el puesto de trabajo al que optamos.
Una situación más difícil de lidiar es cuándo hemos sufrido un despido objetivo, cuyas causas han sido provocadas por actitudes negativas nuestras. En este caso lo mejor es decir la verdad, pero quitándole importancia a la situación, y hacer ver qué no era algo tan grave. Tendremos que seleccionar bien las palabras para, -sin mentir-, intentar dejar a entender que la situación se magnificó. Si en caso contrario no asumimos errores y caemos en descalificaciones o críticas, es probable que empeoremos la situación.