Cómo solicitar la incapacidad permanente

¿Tienes dudas acerca de cómo solicitar la incapacidad permanente? Según explica la Seguridad Social, la incapacidad permanente es “la situación del trabajador que, después de haber estado sometido al tratamiento prescrito, presenta reducciones anatómicas o funcionales graves que disminuyan o anulen su capacidad laboral”. Es decir, el trabajador que recibe la prestación contributiva por incapacidad permanente es aquel que ya no puede desempeñar su oficio. Sin embargo, existen diferentes grados o tipos de incapacidad permanente que explicaremos a continuación.

Prestación por incapacidad de gran invalide

 

Beneficiarios de la incapacidad permanente

Los beneficiarios de prestaciones por incapacidad permanente son, en primer lugar, los individuos incluidos en el Régimen General de la Seguridad Social que sean declarados en cualquiera de los diferentes tipos de incapacidad (parcial, total o absoluta).

Si su incapacidad está originada por una enfermedad profesional o accidente no les será exigido ningún período previo de cotización para recibir su prestación.

Si no es así, tendrán que haber cubierto un período mínimo de cotización mínimo. Este período debe ser, en menores de treinta y un años, la tercera parte del tiempo transcurrido entre la fecha en que el trabajador cumplió los dieciséis años y la del hecho causante de la incapacidad.

En sujetos de treinta y un años y mayores de esta edad, el cómputo debe hacerse calculando la cuarta parte del tiempo transcurrido entre la fecha en que cumplió los veinte años y el día en que se produjo el hecho causante de la incapacidad con un mínimo, en cualquier caso, de cinco años.

Además, la quinta parte del período de cotización exigible debe estar incluida en los diez años inmediatamente anteriores al hecho causante.

En la incapacidad permanente parcial, el período mínimo de cotización es de mil ochocientos días, comprendidos entre los diez años inmediatamente anteriores a la fecha en la que se haya extinguido la incapacidad temporal de la que derive la permanente.

La solicitud de pensión de incapacidad permanente a la Seguridad Social puede realizarse:

  • De oficio, es decir, por iniciativa de la entidad gestora cuando el trabajador procede de incapacidad temporal y ha sido dado de alta médica por agotamiento de plazo o por encontrarse en una situación constitutiva de incapacidad permanente;
  • A petición de la Inspección de Trabajo;
  • Por petición del Servicio Público de Salud, previa autorización del interesado;
  • A solicitud de entidades colaboradoras;
  • A petición del interesado. En este caso, el más común, debe cumplimentar un modelo de solicitud y aportar documentación específica.

La solicitud se presenta en los centros de atención e información del Instituto Nacional de la Seguridad Social.

¿La incapacidad permanente cotiza para la jubilación?

En el momento en que es declarada la incapacidad permanente de un trabajador, en cualquiera de sus grados, la empresa deja de cotizar por este trabajador a la Seguridad Social.

Solicitar la incapacidad permanente parcial

La incapacidad permanente parcial está definida por una reducción no inferior al 33% en el rendimiento del trabajador para desempeñar su oficio. No obstante, al no ser una incapacidad total, no inhabilita al individuo para ejecutar tareas fundamentales propias de su profesión.

Solicitar la incapacidad permanente total

A diferencia de la incapacidad permanente parcial, la incapacidad permanente total inhabilita completamente al trabajador para la realización de las tareas propias de su profesión.

Accidente o enfermedad son las causas que originan este tipo de incapacidad. Aunque se trate de una incapacidad total, inhabilita al trabajador a desempeñar su trabajo habitual pero no a buscar otro trabajo con funciones diferentes, que su estado de salud le permita desempeñar.

Si el trabajador que recibe esta incapacidad lo prefiere y su estado de salud así lo recomiende, puede solicitar una pensión de forma vitalicia y dejar el mundo laboral definitivamente.

Solicitar la incapacidad permanente absoluta

En este supuesto, la inhabilitación del trabajador es para desempeñar cualquier tipo de oficio o profesión. Hay aquí una imposibilidad de realizar cualquier trabajo debido al estado de salud del individuo.

Hay enfermedades que, por sí mismas, son consideradas como tributarias de una situación de incapacidad permanente absoluta, como la fibromialgia y fatiga crónica en grado IV, esquizofrenia, Alzhéimer, artritis reumatoide, infección por VIH o enfermedad de Crohn, entre otras.